Los alumnos Blanca Stella González Rodríguez, Diana Elizabeth Arias Valdés, Brenda Márquez León, David Israel Ramírez Colín y Daniel Toledo Aranda elaboraron este bote electrónico, denominado Triba (triturador de basura) y pertenecen al Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt-9) “Juan de Dios Bátiz”.
“Pensamos en un basurero inteligente porque en la actualidad toda la tecnología se enfoca a la ecología, en virtud de que se trata de un tema primordial para el desarrollo sustentable no sólo en México, sino en el mundo”, explicó David Ramírez Colín.
Los alumnos expusieron que aproximadamente cada día la ciudad de México genera 12 mil 500 toneladas de residuos sólidos urbanos producidos por más de ocho millones de habitantes, por lo que la generación per cápita de residuos sólidos equivale a 1.4 kilos al día.
“El objetivo es tener un sistema sustentable de desechos de residuos sólidos y, en consecuencia, la rentabilidad de su manejo”, detalló Toledo Aranda.
El alumno explicó que el Triba está dotado con dos motores: uno que baja una placa para compactar basura inorgánica (latas, botes, entre otros) y otro que contiene aspas para triturar la basura inorgánica.
El bote tiene entradas y salidas para los cajones, a fin de darle mantenimiento; está hecho de malla para observar el mecanismo en funcionamiento y sus paredes son de acero para que los desechos orgánicos no lo oxiden, precisó Arias Valdés.
En la parte de electrónica, los alumnos politécnicos trabajaron con un circuito de rectificación para que el voltaje no pase directamente a los motores y haya riesgo de que se quemen los componentes, explicó González Rodríguez.
Márquez León detalló que este aparato tiene un microcontrolador PIC programado que funciona por medio de señales eléctricas; su lenguaje es sencillo y para controlarlo no es necesario que memorice tantos comandos en comparación con un procesador, lo que hace más fácil su utilización.
El prototipo por el momento es de gran tamaño, cuenta con un teclado especial con push buttons y una pantalla para observar las instrucciones, pero se pretende hacerlo más pequeño porque está diseñado para una casa-habitación.
“El proyecto para casa-habitación se puede retrasar porque la Ley de Residuos Sólidos no se acata actualmente como debe ser en la ciudad de México, lo que nos da tiempo para realizar los detalles al proyecto y poder venderlo”, dijo la alumna politécnica.
Con esta innovación los jóvenes politécnicos pretenden inculcar en la sociedad una cultura ambientalmente responsable, fomentar la innovación de productos funcionales para el tratamiento de residuos e ir a la vanguardia mediante el desarrollo de nuevas tecnologías