“Perú necesita en el sector construcción mucha innovación y tecnología, como el ahorro significativo en consumos energéticos, de agua y empleo de material reciclado que, sumados, logran un ambiente interior con mejor calidad para el usuario y un impacto favorable en la reducción de emisiones de dióxido de carbono”, manifestó el ministro.
Asimismo dijo que hay varias buenas prácticas en construcción como las “edificaciones verdes”, las cuales son levantadas bajo una óptica ecoamigable.
En estas construcciones los edificios pueden tener un sistema que reprocese las aguas servidas, que luego pueden ser usadas para regar los jardines o para los baños.
A su vez indicó que existen sistemas de aire acondicionado que funcionan con 60 por ciento menos de dispendio de energía, produciendo el mismo efecto.
En tanto que los hoteles u oficinas pueden usar urinarios secos, que no usan agua sino productos naturales que descomponen la orina y no producen olores; y lavamanos con sensores que regulan el paso del agua y tienen una batería que dura 20 años. Estos aparatos pueden ahorrar hasta un 30 por ciento del consumo de agua potable.
Brack señaló que en las oficinas los escritorios de los trabajadores deben estar cerca de las ventanas, para ahorrar la luz artificial y sacar mayor provecho de la luz natural, la cual es más saludable para las personas.
También dijo que las casas pueden construirse bajo el contexto de “edificaciones verdes”, porque pueden usar reguladores de luz, que es un sistema de iluminación con sensores inteligentes capaces de encenderse o apagarse al comando de sensores térmicos y de presencia, que ahorran hasta en un 20 por ciento el consumo de electricidad.
Estas declaraciones las ofreció en el marco del show room “Construcción sostenible en Perú”, que presentó el Ministerio del Ambiente con el Consejo Peruano de Construcción Sostenible (Perú GBS), que tuvo por objetivo invocar al sector construcción poner en práctica las medidas ecoeficientes señaladas.
En la exhibición se pudo observar una oficina compuesta por una alfombra fabricada con materiales reciclados y muebles de oficina con materiales reciclables, ambos se alinean en el desarrollo sostenible porque no usan ni procesan materiales vírgenes para su fabricación.
También hubo paneles fotovoltaicos que permiten usar energía renovable como la luz del sol, transformándola en energía eléctrica; y una turbina de viento que hace lo mismo empleando la energía del viento.
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